El mundo de los “youtubers” menores

El post de hoy va dedicado a hablar de una plataforma online que ya hace un tiempo que forma parte de las vidas de muchas personas YouTube. Datos recientes muestran como cada mes cientos de miles de usuarios publican vídeos en la plataforma. Cifras altísimas y que parece ser que no tienen detonador. Pero ¿cuál es la finalidad de subir contenido en dicho medio?

Hay varios motivos por los cuales los usuarios de esta plataforma de contenidos audiovisuales los suben al gran público. Algunos quieren mostrar sus viajes, ideas o pensamientos. Otros pretenden hacerse ricos o al menos, intentarlo. Otros quieren compartir recetas gastronómicas. Y otros publicar videos de risa. Y así muchas razones más.

El poder compartir estas experiencias y contenidos siempre ha sido algo positivo. Impulsa la creatividad y puede permitir a algunas personas a abrirse un camino profesional. Sin embargo, en los últimos tiempos ha aumentado el uso de esta plataforma por niños menores de edad que por su cuenta. O en la mayoría de casos, ayudados por algún adulto (puesto que algunos son muy jóvenes). Y publican videos protagonizados por ellos mismos.

¿Qué pasa con los menores?

Lo que para algunos parece divertido, para mucho de los menores protagonistas de los vídeos supone una pesadilla. En muchos casos, se ven obligados por sus protenitores a gravar su vida cuotidiana sin que puedan gozar de intimidad. Y tanto es así que en los últimos años se han hecho públicos varios casos en dónde padres o tutores obligaban a sus hijos a grabar contenido. Abusos que tienen lugar tanto delante como detrás de las cámaras.

En nuestro ordenamiento jurídico se encuentran muchos derechos que tienen como objetivo regular la seguridad jurídica de los menores. Sin ir más lejos, existe la Ley Orgánica 1/1996, de 15 de enero, de protección jurídica del menor, de modificación del Código Civil y de la Ley de Enjuiciamiento Civil. En dicha norma, en especial, se regula el principio del interés superior del menor. Dicho principio tiene por objetivo garantizar el desarrollo integral y la vida digna de los menores. Así como las condiciones materiales y afectivas que permitan vivir plenamente y alcanzar el máximo de bienestar posible a los menores.

Casos recientes

En los últimos tiempos ha habido varias denuncias de menores sobrepasados por la presión que les generaba la insistencia de sus padres o tutores para la grabación de videos.  Alguno de los casos más recientes son los siguientes:

Familia Martin:

Mike Martin consiguió obtener más de 750.000 suscriptores con su canal familiar llamado “DaddyOFive”. Según sus declaraciones, el canal había sido creado con la aceptación de todos los miembros de la familia con el fin de divertirse, de manera que subía vídeos en la red en donde se relataba la vida diaria de la familia Martin. Sin embargo, el canal fue clausurado porque se detectó un abuso de los padres hacia sus hijos. En el canal gastaban bromas pesadas a los menores  o incitaban a los menores a pelearse entre ellos. La Fiscalía local de Maryland en EE. UU condenó a los padres a cinco años de libertad bajo vigilancia y el padre perdió la custodia de los hijos en favor de su madre biológica.

Verdeliss:

Se trata de una “youtuber” española que creó un canal en donde comparte su día a día al mando de una familia numerosa. En sus vídeos, trata todo tipo de problemas que se encuentran en una familia. Temas de salud, elección del nombre de sus hijos y  trucos y consejos, etc. Sin embargo, en 2018 después de su participación en un programa de televisión de gran audiencia aumentaron exponencialmente sus seguidores. Y con ello, las sospechas de los que los visionaban de que se podía estar explotando a los menores que aparecían en los videos. La plataforma Change.org publicó una iniciativa, “No a la explotación infantil a YouTube” en donde se pedía el cierre de su canal.

Las Ratitas:

Así se llama el canal de You Tube de dos niñas que ya cuentan con más de 11 millones de suscriptores. En sus vídeos, anuncian maquillaje, cosen, cocinan o juegan con muñecos. A pesar de que sus progenitores consideran una forma de actuar normal el exponer a sus hijas en esta plataforma, la Fiscalía de Menores está estudiando este caso a raíz de una denuncia del Consejo del Audiovisual de Cataluña que consideraba que los vídeos reproducen estereotipos de género.

Conclusiones

Todos dichos casos demuestran la importancia y la gran protección que gozan los menores. Así pues, la vulneración de sus derechos esenciales conlleva a la imposición de graves sanciones. Sanciones que pueden incluso llegar a quitar la custodia de ellos. No devemos olvidar que las nuevas tecnologías suponen un gran avanze para nuestra sociedad. Pero que ante los elevados riesgos que ha demostrado y cada día demuestra tener, ha sido de vital importancia su regulación normativa. Una normativa que debe ser cumplida por todos si queremos garantizar nuestra seguridad.